Jóvenes de diferentes rincones de Europa se unieron entre el 15 y el 18 de febrero en Valladolid, en el encuentro para el desarrollo del Modelo de la Unión Europea: EU-NextGen Simulation. Esta actividad se organizó en el marco del proyecto Europeo GamEUfying: Learning about the European policy for youth participation, que coordinamos desde el Consejo de la Juventud de Castilla y León, en cooperación con entidades europeas como CEIPES (Italia), Rosto Solidário (Portugal) y ASPAYM Castilla y León.
El enfoque principal de esta jornada fue replicar a través del juego de rol el proceso legislativo ordinario y comprender cómo se toman las decisiones en Europa. Los 24 participantes desarrollaron diferentes roles de juego, en el que debían representar a un partido político -si eligieron ser eurodiputados- o a un país miembro -si decidieron tomar el papel de ministros-. Las cuatro líderes de grupo, que acompañaban a los asistentes, jugaron el papel de presidentas de las instituciones intervinientes en la simulación
¿Cómo se toman las decisiones en la UE?
Tanto el Parlamento como el Consejo de la Unión Europea tienen el papel de representantes de los ciudadanos y los gobiernos nacionales ante la Comisión Europea. Deciden las leyes a través de lo que se conocen como las dos lecturas y pueden surgir de la necesidad de la población, de las empresas o de propuestas ciudadanas. El proceso expuesto de manera muy breve es el siguiente:
- La Comisión Europea lanza una propuesta que, en un primer paso, es revisada por el Parlamento. Después, se le entrega al Consejo con las modificaciones pertinentes para que hagan sus valoraciones o bien aceptan las ya realizadas, por lo que la posición se aprobaría. En caso contrario, volvería a los eurodiputados.
- Si estos eurodiputados están de acuerdo, se aceptan las propuestas de los ministros del Consejo y, si no, volverían a realizarse los cambios oportunos hasta que se llegue a un acuerdo esta segunda vez.
- Por último, si después de esta vuelta y los cambios realizados ninguna de las dos instituciones se pone de acuerdo, intervendría el Consejo de Conciliación, un grupo formado por miembros de parlamento y ministros, y que daría como resultado la tercera y última lectura.
La gamificación: una metodología muy poderosa
El éxito de la implementación de esta metodología, además del juego y la implicación de los asistentes, es generar un manual de dinámicas que estará disponible en los cuatro idiomas oficiales del proyecto (español, inglés, portugués e italiano). Así, todas las entidades juveniles, educadores y facilitadores podrán replicar las actividades. Estos contenidos estarán muy pronto publicados en abierto en la página web del proyecto, junto con otros recursos muy atractivos.
Al tratarse de un proceso difícil de explicar per se, los miembros del Consorcio concordaron en que los asistentes aprendieron mucho gracias a la gamificación de este proceso. Pudieron presenciar en primera persona cómo se desarrollan las votaciones y se deciden las enmiendas en Europa, una decisión que nos afecta a todos. En este caso de modelo, los temas elegidos versaron sobre una Europa adaptada a la era digital y el impulso de la democracia europea, prioridades de la Comisión Europea en el periodo 2019-2024.
Compartir conocimiento, valores y cultura
Todas las personas participantes convivieron durante cuatro días en el albergue Juvenil en Callejón, donde además de las sesiones parlamentarias disfrutaron de tiempo libre de desconexión, ocio y distensión, en el que el intercambio cultural estaba presente en todo momento. Esto culminó con la noche intercultural, en la que se compartieron productos típicos, bailes tradicionales y música popular de sus lugares de origen.
Este evento no solo fue una gran oportunidad para aprender sobre el funcionamiento de las instituciones europeas, sino también para fomentar el compromiso cívico entre los asistentes. En un mundo cada vez más interconectado, es esencial que la juventud participe activamente en los procesos legislativos para dar forma al futuro de Europa. Esto es aún más relevante cuando en apenas 4 meses se llevarán a cabo las elecciones al Parlamento Europeo.
Así, este encuentro europeo fue una experiencia enriquecedora y estimulante para quienes formaron parte. Ha supuesto una plataforma para el diálogo intercultural, el intercambio de ideas y el fortalecimiento del compromiso cívico entre los jóvenes de Europa. Este tipo de iniciativas son fundamentales para construir una sociedad más inclusiva, participativa y democrática en el continente. Agradecemos al programa Erasmus + y a la Agencia Nacional Española por hacer esto posible.